Tengo mil años intentando hacer entender al mundo que estoy en una dimensión distinta, que veo las cosas con más lentitud y placer, que disfruto de cada cosa que me hace levantar la mirada, que vivo para volver y que todas las miradas me distraen. Regreso cada determinado tiempo, mi parte más intensa me dice que lo haga, recuerdo el instante que no quiero recordar, pues, tengo poco que decir, pero mucho escrito y por escribir.
martes, 17 de mayo de 2011
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Hace mucho que no pasaba por aquí, estaba pensando un poco, desde hace mucho que no pienso en nada; pensaba en B’jork, platónica amada mía, cuantas cosas nuevas haces, yo, hace poco conocí a una belleza nueva, como diría Edgar Alan Poe si no me equivoco, yo mismo la he creado, se dice que la he tallado con la modestia de mis manos artísticas, con la sola cautela de hacer una no más, y es que, hacer poesía para ella no me ha salido, todavía, aunque le dé las vueltas acostumbradas a mis pensamientos para rebuscar en las comisuras de mi cabeza las frases, me es difícil. Pero, con calma, habrá tiempo, pues siempre regreso.
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La poesía acontece, uno solo tiene que estar atento a ese momento sagrado. Si se vive atento, en contacto con todo lo que tiene un latido como tu belleza nueva, la poesía surgirá en el momento adecuado.
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